domingo, 29 de mayo de 2011

Por si las dudas

No me hable de valores, señor;
no abuse de palabras elegantes
suenan huecas
a pura teoría

¿Qué es eso, señora?
¿Valores de qué? ¿De la bolsa?
con valores usted dice todo
y nada

No me hable de valores, maestro.
¿De qué país nos trajo ese término?
La escala es movible, señor,
usted mismo la ajusta.
No me hable de algo
que flota y se asienta
donde le conviene

Hábleme de sentimientos,
eso sí lo entiendo.
Hábleme de sus acciones:
¿Qué siente usted al hacerlas?
¿A quién dañan?; ¿a quién benefician?
¿Qué sienten los demás?
Así nos vamos entendiendo.

No sea usted falso, señor
¿A quién quiere usted aparte de a usted mismo?
No me hable usted de valores
hábleme de sentimientos

¿Que no los tiene?
¿Que quiere a su familia pero
no siente nada por quien no conoce?
Ya nos vamos entendiendo

Usted no necesita teoría de valores, señor:
necesita conciencia
y corazón
si lo tiene quieto,
¿cómo se lo estrujaremos?

Ya sé que usted no robó nada a nadie
y se ganó lo que tiene
pero, ¿entiende que si usted tiene mucho o algo,
es porque otros tienen poco o nada?

¿Y si es cierto que el cielo existe?
¿no le da miedo morirse?
… por si las dudas,
mejor no me hable usted de valores,
hábleme de sentimientos

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