domingo, 4 de septiembre de 2011

Alfombra de violetas

Escrito dominguero

Apenas se siente angustiado
cierra los ojos para rodearse de violetas
No solo de su color y su textura
sino de su aroma que completa la existencia
Campos eternos que abrazan la vida
de continua suavidad y de tibieza

Cuando abre los ojos
de nuevo observa la realidad de siempre
cuando se tiene abierto el corazón no es posible no ver
de lo que constan los días de cualquiera
para que uno viva bien cientos viven mal
esto está arraigado en la sangre de la tierra

Cierra los ojos y la tesitura cambia
con la perfección de las violetas
todas de igual color
igual tamaño
el mismo olor que inunda los sentidos
esa sensación de alegría
de satisfacción,
se instala cuando el paisaje
es el de las alfombras de flores
que a lo lejos se ven como una
que no cambian los mandamientos

Para crecer una no lastima
ni saca provecho de otra
comparten los bienes del riego
crecen y viven en paz
¿Será que al cielo solo van las violetas?

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